Otra vez por aquí. Rebuscando cosas que contaros. Ya hemos superado, literalmente, la cuarentena, como podéis ver en el encabezamiento de esta entrada. Día cuarenta y dos y aquí seguimos, con menos paciencia, menos ánimo, pero con la firme resolución de que podremos con esto. Admiro a la gente realista. La gente que lo está pasando mal, que no se oculta en transmitir su malestar por el motivo que sea, la gente que está deprimida o ansiosa, la gente que está preocupada o enfadada. Me he vuelto un poco talibán emocionalmente hablando. Aquellos y aquellas que están viviendo este confinamiento como unas vacaciones, que solo encuentran cosas positivas en todo esto, no los soporto, lo siento. Yo también busco cosas positivas y las encuentro. Me tomo una cerveza o un vino leyendo en la terraza al sol, escucho música, algo de actividad física, practico mi yoga particular que es una tabla de estiramientos de unos cuarenta minutos diarios, veo varias series, hago tareas d